7 lecciones de gestión de Ted Lasso

7 lecciones de gestión de Ted Lasso

Una clave para la gestión de equipos es contar con un líder que sepa bajar la presión y colocar la atención del grupo en lo realmente importante. Es una de las 7 lecciones de gestión de Ted Lasso, exitosa serie de Apple TV, con poco menos de dos temporadas al aire. 

Para quienes no la han visto, la serie cuenta la historia de un equipo inglés, AFC Richmond, que queda en manos de Rebecca (Hannah Waddingham) la ex esposa del anterior dueño, y su primera orden es despedir al actual entrenador para traer a Theodore “Ted” Lasso (Jason Sudeikis). 

Lasso es un entrenador estadounidense de fútbol americano que desconoce las reglas pero busca potenciar grupos humanos. Al principio le llueven los insultos, pero incluso en momentos duros en lo personal, los asume con humor y siempre antepone la condición humana de sus jugadores, asistentes y directivos por encima del resultado deportivo. 

Una serie que entre comedia y fútbol, deja lecciones que en la Agencia Corner queremos compartir hoy con ustedes. 

7 lecciones de gestión de Ted Lasso: piensa en el grupo

7: Be a Goldfish

Sam Obisanya es un delantero nigeriano en el equipo de Lasso que está atravesando por una mala racha. Lasso lo detiene y le pregunta: “¿Sabes cuál es el animal más feliz de la naturaleza? Un pez de colores (Goldfish, en inglés). ¿Y sabes por qué es el animal más feliz en la tierra? Porque tiene una memoria de 10 segundos. Sé un pez de colores (Be a goldfish, en inglés)”. Muchas veces nos obsesionamos con los resultados y nos frustramos enormemente. La crisis de la pandemia no ayuda demasiado. Pero esa lección de olvidar pronto la frustración y perseguir nuevamente el objetivo, ayuda.   

6: Sobre caballos y desafíos

“Asumir un desafío es muy parecido a montar a caballo. Si se siente cómodo mientras lo hace, probablemente lo esté haciendo mal”, dijo Lasso a sus asistentes en uno de los primeros capítulos de la serie. Pensemos en todas esas pymes que no sobreviven su primer año de existencia. Entendemos que muchas veces sea lo más viable, pero lo normal es que existan dificultades. A todos nos pasa y en el camino iremos aprendiendo lecciones valiosas. Caerse está permitido, levantarse no es opcional: es obligatorio. 

Otra escena hermosa es esta. “A veces los cambios son buenos”:

5: Rodéate de gente como el Coach Beard

Lasso no sería nadie sin el invaluable apoyo del Coach Beard, un simpático personaje barbudo (Brendan Hunt). De pocas palabras, pero siempre asertivo, cuidadoso de Lasso y con tal nivel de compenetración que es capaz de seguir conversaciones con su compañero de manera casi automática. No siempre es posible pero, si puedes rodearte de personas, rodeate siempre por un Coach Beard. Ni el dinero puede comprar ese grado de apoyo.

4: Potencia a la gente como Nathan

En el primer capítulo, Lasso suma a su causa a Nathan Shelley (Nick Mohammed), un tímido utilero que, al final, conoce todas las incidencias dentro del vestuario. Lasso y Beard lo convierten en un aliado invaluable. Muchas veces llegamos a equipos que tienen gente con talentos que ni ellos mismos conocen. Lo mismo pasó en el capítulo 4 de la segunda temporada, cuando sin que se de cuenta, Roy Kent termina aceptando la oferta de Lasso para sumarse a su cuerpo técnico. 

3: Autenticidad y empatía para ganarte a los Roys Kents y Jamies Tartts.

Uno de los principales problemas que tuvo Lasso en lo que va de serie, fue ganarse el cariño y el respeto de los dos grandes referentes de su club: el capitán Roy Kent (Brett Goldstein) y el goleador Jamie Tart (Phil Dunster). Al primero lo convenció siendo auténtico y escuchando su primera petición (reparar la ducha). Al segundo, desde la empatía y la paciencia (alerta de spoiler: repescándolo cuando el Manchester City lo dejó libre). Hay liderazgos que conocen bien con quién hay que ser duros y con quién, más asertivos. 

2: No seas Led Tasso

“Cuando se trata de los vestuarios de un equipo deportivo, me gustan como los trajes de baño de mi madre: Solo quiero verlos de una pieza”. Esta es una de las tantas escenas de la primera temporada en las que Lasso trata de integrar a su equipo.

La segunda, y la más notable, es cuando se mete en el personaje de “Led Tasso”. Este ser es la antítesis de Ted: un gruñón, cascarrabias e hiperexigente. Tanto, que el equipo se une en torno a odiar por unos segundos a este alter ego, que para alivio del Coach Beard y el resto del equipo, no aparece más. 

1: “Sé curioso, no prejuicioso”

La frase no es de Ted Lasso, es de Walt Whitman. Pero el momento en el que la pronuncia nuestro entrenador favorito es notable. Lo hace durante una partida de dardos en el bar preferido de todos los hinchas de Richmond, frente al ex esposo de Rebecca y otrora dueño del club.

El millonario ex propietario desafía a Ted, confiado porque los dardos y los pubs ingleses, son tradiciones locales centenarias que, en rigor, deberían desconocer los estadounidenses.

Aquí reproduciremos el diálogo completo. Lasso debía lanzar dos triples 20s y una diana para ganar. 

– Lasso: “Sabes, Rupert, la gente me ha subestimado toda mi vida. Y durante años, nunca entendí por qué. Realmente me molestaba. Pero entonces, un día, estaba llevando a mi pequeño a la escuela y vi esta cita de Walt Whitman. Estaba pintada en la pared y decía: ‘Sé curioso, no prejuicioso’. Me gusta eso”.

(lanza el primer triple 20). 

– TL: “Así que vuelvo a mi coche y conduzco al trabajo, y de repente me doy cuenta. De todos esos chicos que solían menospreciarme, ninguna tenía curiosidad. Pensaron que tenían todo resuelto. Así que juzgaron todo y juzgaron a todos. Y me di cuenta de que yo no tenía nada que ver con eso. Porque si tuvieran curiosidad, habrían hecho preguntas cómo: ‘¿Has jugado antes a los dardos, Ted?’”.

(lanza el segundo triple 20)

– TL: “A lo que hubiera respondido: ‘Sí, señor. Todos los domingos por la tarde en un bar de deportes con mi padre. Desde los 10 años hasta que cumplí los 16, cuando falleció”

(lanza al blanco). 

Ted Lasso.

Nos dejó pensando

Buena parte de nuestros problemas nacen porque, en medio de nuestro “empoderamiento”, dejamos de hacernos las preguntas adecuadas. 

¿Podrá Lasso llevar a Richmond de vuelta a la Premier League? Esperemos que sí. Pero si no lo logra, igual nos habremos enamorado de esta comedia y de la manera que tiene este entrenador de enseñarnos sobre la vida. Muchas veces lo que necesitamos es ser empáticos con nuestro equipo y saberles enseñar que la solución a los problemas podrían ser más sencillos de lo que parecen. 

Es por ello que compartimos estas 7 lecciones de gestión de Ted Lasso.

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